
Diversidad de creencias religiosas en mexico
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La Constitución mexicana garantiza la libertad de religión o de creencias (LCR) y otros derechos humanos a todos sus ciudadanos. Sin embargo, en la práctica, las violaciones de los derechos humanos son un hecho común y generalizado en algunas regiones de México.
Los altos niveles de miedo a denunciar las violaciones y la falta de confianza en las instituciones gubernamentales y en los mecanismos de justicia hacen que el número de violaciones denunciadas y documentadas contra los líderes religiosos sea probablemente sólo un pequeño porcentaje de las violaciones reales contra los líderes religiosos en un año determinado.
La reticencia del Estado a defender el FoRB de forma proactiva se ve agravada, en algunas partes del país, por la Ley de Usos y Costumbres, que otorga una importante autonomía a las comunidades indígenas para aplicar y mantener sus propias normas sociales y culturales. Se supone que esta ley debe ejercerse en consonancia con las garantías de derechos humanos de la Constitución mexicana, pero en la práctica no se aplica. Muchos líderes locales de las comunidades que funcionan bajo la Ley de Usos y Costumbres ordenan la uniformidad de la comunidad en términos de prácticas y creencias religiosas, obligando a todos los miembros de la comunidad a participar en las actividades religiosas de la mayoría o a enfrentarse a un castigo.
Catolicismo
En México se hablan muchas lenguas diferentes y la mayoría de la población es multilingüe. Hay 68 lenguas reconocidas oficialmente, de las cuales 63 son indígenas. La principal es el náhuatl, la antigua lengua de los aztecas, utilizada en el centro del país. El maya se habla en Chiapas y Yucatán, mientras que la familia de lenguas zapotecas predomina en Oaxaca y Veracruz.
Tras la colonización española, la sociedad mexicana contemporánea se divide entre mestizos e indígenas. Los mestizos representan alrededor del 60% de la población total, frente a un 20% de amerindios -nativos mexicanos- que se dividen en muchas comunidades que hablan su propia lengua. Otras minorías y los europeos blancos completan el cuadro étnico.
El dominio absoluto del catolicismo está disminuyendo gradualmente en México, pero sigue siendo la religión de aproximadamente el 85% de los mexicanos. Existe un pequeño número de Testigos de Jehová, adventistas y mormones, cuyo número aumenta cada año. En México también hay un 10% de protestantes “tradicionales” y un 5% de judíos. Las creencias indígenas no han desaparecido del panorama religioso y a menudo se incorporan a las prácticas católicas. El símbolo más fuerte de esta fusión es el culto que muchos mexicanos dedican a la Virgen de Guadalupe. Esta celebra la aparición de la Virgen María a un joven indígena, Juan Diego, poco después de la conquista española. Lo más llamativo es que tuvo lugar en el monte Tepeyac, donde los aztecas habían construido un templo a Tonatzin, la “madre de los dioses”. Allí se construyeron una capilla y una basílica, que rápidamente se convirtió en un importante lugar de peregrinación y que hoy es el tercer sitio sagrado más visitado del mundo. En 2002, el Papa Juan Pablo II canonizó a Juan Diego, que se convirtió en el primer santo indígena del calendario católico.
Historia de la religión en México
La mayoría de los hispanos de Estados Unidos siguen perteneciendo a la Iglesia Católica Romana. Pero la proporción de católicos en la población hispana está disminuyendo, mientras que el número de hispanos que son protestantes o no están afiliados a ninguna religión va en aumento. De hecho, casi uno de cada cuatro adultos hispanos (24%) son ahora ex católicos, según una importante encuesta nacional realizada por el Pew Research Center entre más de 5.000 hispanos. En conjunto, estas tendencias sugieren que se está produciendo una cierta polarización religiosa en la comunidad hispana, con una mayoría cada vez más reducida de católicos hispanos que ocupan un lugar intermedio entre dos grupos crecientes (protestantes evangélicos y no afiliados) que se encuentran en los extremos opuestos del espectro religioso estadounidense.
La Encuesta Nacional de Latinos y Religión de 2013 del Centro de Investigación Pew concluye que la mayoría (55%) de los 35,4 millones de adultos latinos estimados en el país, es decir, unos 19,6 millones de latinos, se identifican como católicos en la actualidad. 1 Alrededor del 22% son protestantes (incluyendo el 16% que se describen a sí mismos como nacidos de nuevo o evangélicos) y el 18% no tienen afiliación religiosa.
Creencias y valores mexicanos
Católico romano (72,1%) Evangelista (no especificado) (2,5%) Testigo de Jehová (1,7%) Evangelista pentecostal (1,3%) Ninguno/Sin afiliación religiosa formal (15,3%) No especificado (No contesta/No sabe) (2,7%) Bautistas (0,4%) Adventistas (0,4%) Mormones (0,2%) Ateos (0,9%) Agnósticos (0,1%) Otros (1,4%)
La rama católica del cristianismo es la religión dominante en México, representando el 78%[1] de la población total en 2020. En las últimas décadas la proporción de católicos ha ido disminuyendo, debido al crecimiento de otras confesiones cristianas -especialmente varias iglesias protestantes, los Testigos de Jehová y el mormonismo- que ahora constituyen el 9,7% de la población, y de las religiones no cristianas. La conversión a denominaciones no católicas ha sido considerablemente menor que en Centroamérica, y el centro de México sigue siendo una de las zonas más católicas del mundo.
México es un país laico y permite la libertad de culto desde mediados del siglo XIX. Las principales denominaciones protestantes y la práctica abierta del judaísmo se establecieron en el país durante esa época. En la actualidad, el protestantismo evangélico, el mormonismo y las religiones populares, como el mexicayotl, han crecido[4][5].